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En las próximas dos semanas, se espera que la producción de calabacita o calabacín de Sonora, en el noroeste de México, alcance su pico. La calabacita es uno de los principales productos de SunFed, que ofrece un amplio programa de hortalizas mexicanas.
La temporada comenzó a mediados de septiembre y se espera que termine a principios de junio. Aunque la temporada es bastante similar a la del año pasado en términos de volumen, se ha desarrollado de forma bastante diferente, ya que los productores han experimentado más fluctuaciones de temperatura y menos lluvia. “Este año ha habido temperaturas cálidas una semana y frías la siguiente, y viceversa”, dice Félix Peralta, director de Producción de SunFed.
“Además, la cantidad de lluvia ha sido menor en comparación con temporadas anteriores. No obstante, la calidad es buena y se espera que los volúmenes totales de producción sean un poco más altos que el año pasado, pero inferiores a los de hace dos años”.
Las fluctuaciones meteorológicas provocaron en un principio un descenso de la oferta, pero ha mejorado recientemente. “La demanda de todas las variedades de calabacín es estable, por lo que el mercado también lo es. Es muy similar a otras temporadas de primavera”, afirma Denise Quiroga, directora de ventas de SunFed.
Predomina el cultivo convencional
SunFed saca al mercado tres variedades diferentes de calabacín: el italiano, así como el gris y amarillo. La variedad gris solo está disponible convencional, pero el calabacín italiano y el amarillo están disponibles tanto convencionales como ecológicos. Sin embargo, el segmento convencional representa el 93% de la producción, mientras que el ecológico supone el 7%. “Esas cifras se han mantenido estables en los dos últimos años”, concluye Peralta.
