ANTONIO OCHOA. EL ECONOMISTA.
Buenos días, buenas tardes, buenas noches. Como muy posiblemente has notado, el espacio agrícola y pecuario en tiempos recientes ha mostrado una inercia alcista muy interesante.
Si lo contextualizamos a los tiempos actuales, como todo en la vida, el ajuste a las circunstancias se da en relación con la capacidad que tenemos para proyectar escenarios posibles o potenciales y operarlos como realidades virtuales.
Nuestros mercados agrícolas son una muestra clara de lo anterior y cuando en semanas anteriores abusamos del hecho de arrinconar los precios agrícolas en la esquina de los precios caídos, y una vez arrinconados sin más espacio para seguir esa dirección, terminamos desacoplándolos y creando una reacción similar, pero en sentido contrario.
Primero que nada, la demanda, resulta que China finalmente entra con todo al espacio de las compras agrícolas y pecuarias en Norteamérica. Los chinos tienen un enorme diferencial de precios entre su maíz doméstico y el maíz importado, solo para darte un ejemplo de lo anterior, digamos que en tiempos recientes ha oscilado entre 100 y 130 dólares por tonelada.
Con lo anterior te hago ver que siendo tan caro el maíz en China, económicamente hace mucho sentido importar a ese diferencial, sin embargo, la decisión última de permitir lo anterior está en manos del gobierno.
Los chinos permiten que el precio domestico sea alto pues han eliminado los subsidios directos, y subsidian indirectamente poniendo obstáculos a la importación de maíz, con lo cual hacerlo es una medida política.
Hoy, los chinos han llegado al mercado internacional como agresivos compradores de maíz, los números hacen sentido, pero también la intención de hacerlo en honor al acuerdo fase 1 con los norteamericanos quienes siguen trabajando dicho acuerdo, pero bajo el radar.
La Casa Blanca está fijada en usar a China como un vehículo de ataque político en la superficie y como tema de campaña, sin embargo, los mandos medios atrás de las cortinas siguen promoviendo la agenda comercial para darle a los agricultores un poco de aire y con ello nutrir el apoyo electoral a quien según algunos escenarios posibles perderá la reelección por paliza, cosa que me parece un tanto exagerada.
Sea lo que sea, en virtud de que lo bajista cambio a alcista, nos es fácil ahora destacar la crónica a modo explicativo una vez que los pronósticos productivos en el “midwest” norteamericano han cambiado, y con demanda pujante de China, los especuladores han sido involuntariamente obligados a neutralizar posiciones de manera urgente.
Sobre lo anterior y solo para hacer lo anterior más entendible, imagina que eres un flamante especulador, y te presento muy amenamente el caso de que el precio del maíz se va a colapsar, imagina que te digo que estamos ante la amenaza de Covid-19, y que la demanda se cancela porque se pierden miles de empleos y que nos van a guardar en nuestras casas, los restaurantes van a cerrar para eliminar brotes de contagio, y que por eso y muchas cosas más, el consumo caerá más allá de lo que podamos proyectar, y no solo eso, imagina que te digo además que los ciclos productivos en el mundo están espectaculares, que se ha sembrado hasta en las macetas y que con ello, la dirección de precios no solo es bajista, es de hecho morbosamente bajista.
Bueno, pues con eso en mente y siendo un sofisticado especulador, tomas acción, y vendes futuros de maíz en el mercado de Chicago, te juegas la ficha en serio y le pones un respaldo económico importante a la anterior apuesta.
Las cosas progresivamente se dan como te las había comentado y por varias semanas y en el recorrido bajista de varios dólares he tenido razón. Sin embargo, y sin aviso, las cosas cambiaron y parece que todo lo anteriormente tratado no es mentira, pero a la vez ya no es tan cierto, así que, siendo muy agudo en tu óptica, decidas que la apuesta bajista carece de potencia, has hecho suficiente dinero en la inercia del mercado, pero es tiempo ya de cambiar de posición y decides neutralizar tus posiciones.
Si estabas en la dirección “corta” (vendida) neutralizas comprando y si lo haces de manera total creas una inercia compradora que detona más compra y provocas que otros que como tu estaban en esa instancia terminen neutralizando, generando un rally súbito que se entiende, pero no se justifica aun con la información que tenemos a la mano.
Ahí es donde estamos y ya con tanta confianza que se despertó la euforia, ahora todo mundo es alcista, hasta que dejen de estarlo, así como cuando eras solamente bajista y de manera eufórica. El mercado no hay duda de que se mantiene irracional más tiempo que uno solvente.
Seamos disciplinado, respetemos la dirección de precios, y no busquemos muchas explicaciones pues como en los toros, cualquiera es torero una vez que se dio la embestida.
Animo.