VÍCTOR CUBILLAS Z. TRIBUNA DE SAN LUIS.
El problema para los agricultores es que es complicado adquirirlas a buen precio.
Las refacciones para la maquinaria agrícola tuvieron un aumento de 30 a 40 por ciento, así como los combustibles, lo cual, es un nuevo golpe para la economía de los productos, ya que se carece de subsidio para estos implementos.
El productor Juan Armenta Magaña, informó que, en el caso de los aceites, que de mil pesos la cubeta, ahora vale mil 400 pesos, un 40 por ciento más del precio original.
“Ya no hablamos del diésel, ya casi estamos en 22 pesos el litro, no hay subsidio para él; en el caso de las refacciones, si las compras en Estados Unidos, pueden ahorrarte un poco, pero tienes que pagar la importación de ellas, por eso es preferible adquirirlas en México”.
Agregó que otro problema, es que, por disposición de la Secretaría de Hacienda, hay que presentar factura, hay que comprobar su gasto.
Expresó que, si se compra alguna refacción en Estados Unidos, hay que importarla para que genere algún tipo de impuesto, y a la larga, sale igual.
“Si hay algún ahorro comprándola en Estados Unidos, pero el problema es la facturación, que pide Hacienda al momento de hacer tu declaración anual”.
Dijo que la nueva miscelánea fiscal será un duro golpe para el sector agrícola, porque habría que pagar impuesto prácticamente de todo.