Los ideales de Zapata siguen vigentes, dice nieto del general; daremos la vida si es necesario
Cuernavaca Mor., Alrededor de mil personas, entre campesinos y pobladores que se oponen al Proyecto Integral Morelos (PIM), algunos en tractores y acompañados por integrantes de organizaciones civiles iniciaron la mañana ayer la lucha por la defensa del agua del río Cuautla, a fin de evitar que la Comisión Federal de Electricidad (CFE) se lleve el vital líquido para la termoeléctrica de Huexca.
La protesta se inició en el contexto de la conmemoración del 109 aniversario del Plan de Ayala, donde los contingentes se congregaron frente a las instalaciones de la Asociación de Usuarios del río Cuautla (Asurco), en el municipio de Ayala, donde mantienen un plantón.
De ahí se dirigieron a la plaza Revolución del Sur, en la estatua del general Emiliano Zapata, en la ciudad de Cuautla, después continuaron por las inmediaciones del río Cuautla, hacia San Pedro Apatlaco, en Ayala, sitio que encontraron resguardado con vallas metálicas y elementos de la Guardia Nacional.
Ahí, frente de las vallas y cientos de policías federales, y a unos metros de donde trabajadores de la CFE concluyen el acueducto del PIM, el nieto del Caudillo del Sur, Jorge Zapata González, afirmó que los ideales del general Emiliano Zapata siguen vigentes y mostró su disposición para defender el agua hasta con su vida, si es necesario
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Recordó que su abuelo y los de otros ejidatarios lucharon y dieron la vida por la tierra, la libertad y la justicia, ejemplo que tomarán para impedir que la CFE se lleve el agua con la que riegan sus cultivos, de los cuales se alimentan.
Conmemoración de los 109 años del Plan de Ayala
“En la conmemoración del Plan de Ayala hace 109 años, nos demuestran, compañeras y compañeros, que los ideales del general Zapata siguen vivos y que con todo, y de ser necesario, hasta con la vida la vamos a defender.
Así que señores ni un paso atrás en la defensa de nuestra agua. Es ahora o nunca. Debemos pensar en las futuras generaciones, así como en su tiempo nuestros abuelos lo hicieron por nosotros. ¡Vamos por toda nuestra agua, ni una gota de agua para esa termoeléctrica!. ¡Adelante, compañeros!
, arengó.
En entrevista, Zapata González puntualizó que esta protesta fue pacífica y no descartó movilizaciones más drásticas posteriormente. Mira, cuando el pueblo decida hacer una manifestación más radical se va tirar todo lo que ya esté construido, eso ya se le advirtió al gobierno y no le va alcanzar a la Guardia Nacional para matar a todos los campesinos de México. El PIM es un proyecto de muerte que quiere imponer el gobierno federal, que encabeza el presidente (Andrés Manuel López) Obrador, a través de mentiras y de manera ilegal
, acusó el también ejidatario de Anenecuilco, municipio de Ayala.
A bordo de tractores intentan derribar valla
En esa parada, los campesinos, algunos a bordo de tres tractores, estuvieron a punto de derribar la primera valla metálica, lo que causó el reforzamiento de elementos federales y que se activaran las alarmas de la Guardia Nacional.
El ruido de la alerta y que un grupo de jóvenes encendiera un bote de aerosol, el cual fue sofocado por un efectivo con un extintor, provocó que los campesinos se replegaran.
En las inmediaciones del río Cuautla, en San Pedro Apatlaco, un grupo de ejidatarios mantenía desde 2016 dos campamentos para evitar que continuaran las obras del acueducto, pero fueron desalojados por las fuerzas federales el pasado 23 de noviembre.
Un hombre intentó derribar con su tractor un muro metálico, pero activistas pidieron calma y mencionaron que la protesta era pacífica, además de que cuentan con 19 amparos y 10 suspensiones, y que mediante Asurco tienen la concesión del río Cuautla por decreto presidencial desde 1926.
Juan Carlos Flores, abogado de los ejidos, e integrante del Frente de Pueblos en Defensa de la Tierra y el Agua de Morelos, Puebla y Tlaxcala, pidió a los campesinos y núcleos ejidales unirse para luchar juntos y evitar el robo del agua
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Recordó que el 28 de noviembre de 1911 se firmó el Plan de Villa de Ayala, al grito de: ¡abajo las haciendas, arriba los pueblos!
. Y hoy el grito es: ¡abajo los megaproyectos, arriba los pueblos!
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A las 13:30 horas concluyó la movilización en la que participaron ejidatarios y pobladores de Huexca, Yecapixtla, Tepoztlán, Xoxocotla, Jantetelco, Amilcingo y pueblos de Cuernavaca, entre otros, así como alumnas de la Escuela Normal Rural de Amilcingo Emiliano Zapata.
La termoeléctrica de Huexca, municipio de Yecapixtla, forma parte del PIM y el gobierno federal pretende que inicie actividades el diciembre próximo.
Contra el megaproyecto que impulsó Calderón, 9 años de lucha
Cuernavaca, Mor., En 2011, la Secretaría de Energía, junto con la CFE, anunció el Proyecto Integral Morelos (PIM), obra impulsada por el gobierno de Felipe Calderón Hinojosa (2006-2012), el cual contempla dos termoeléctricas, un gasoducto y un acueducto.
Una termoeléctrica ya esta terminada en la comunidad indígena de Huexca, municipio de Yecapixtla.
El megaproyecto fue autorizado e impulsado por las administraciones estatales de Morelos, primero por el entonces gobernador panista Marco Antonio Adame y después por el perredista Graco Ramírez.
En agosto de 2012, el secretario de Desarrollo Económico estatal, Rafael Tamayo Flores, declaró que la obra fue solicitada por los empresarios de Morelos, y se trataba de una inversión de mil 600 millones de dólares. Ese año afirmó que el PIM no se cancelaría pese a las protestas que había en Huexca. Lo financiaban CFE y las trasnacionales españolas Elecnor y Abengoa.
Las termoeléctricas de ciclo combinado utilizarían vapor y gas natural para alimentar sus turbinas; para ello, aparte del acueducto, requerían un gasoducto, el cual atravesaría 80 comunidades de Tlaxcala, Puebla y Morelos.
Sin embargo, las administraciones panistas de Adame y Calderón no pudieron arrancar con el PIM, sino hasta que llegó Graco Ramírez junto con Enrique Peña Nieto, quienes enviaron a la fuerza pública a la comunidad de Huexca, Yecapixtla.
Por 9 años, los integrantes del Frente de Pueblos en Defensa de la Tierra y el Agua de Morelos, Puebla y Tlaxcala, en el que se integraron los pueblos afectados por este megaproyecto, han sufrido desalojos violentos, represión, criminalización, violaciones a sus derechos humanos y división en sus comunidades. Además, en estos años de resistencia, padecieron el asesinato de activistas opositores como Samir Flores Soberanes (20 de febrero de 2019). Otros que han defendido el medio ambiente y sufrieron represiones son Juan Carlos Flores Solís, detenido el 7 de abril 2014, en Puebla, y liberado en enero de 2015.
Jaime Domínguez Pérez fue arrestado en dos ocasiones, en el gobierno de Graco Ramírez, lo torturaron porque trató de impedir que continuará la obra del acueducto.