TRIBUNA CAMPECHE.
MÉRIDA, Yucatán. A un mes de que finalice la temporada de pulpo se han capturado ocho mil toneladas de las 34 mil que se registraron en 2019, por lo que empresarios visualizan un mal cierre comercial y productivo, debido a factores como la pandemia por Covid-19 y los fenómenos naturales.
El empresario José Luis Carrillo Galaz señaló que dos factores que han propiciado que el sector esté cerrando con números rojos es la pandemia y los fenómenos climatológicos que en Yucatán se han registrado, entre tormentas y huracanes, como Gamma y Delta.
“A un mes de que termine la temporada de captura de pulpo vemos un panorama triste. Si hacemos un recuento y nos vamos un poquito hacia atrás, históricamente el pulpo es la pesquería más importante de la entidad, desde el punto de vista económico”, resaltó.
Sin embargo, señaló, apenas se han capturado entre ocho mil toneladas hasta el corte de septiembre, pero como ha habido poca actividad por el mal tiempo no creo que haya aumentado. Esos números demuestran una disminución importante, lo que nos arroja realmente un año catastrófico para la actividad.
El también presidente de la Federación de Sociedades Cooperativas Pesqueras del Centro y Poniente del Estado indicó que esta caída en la captura del pulpo conlleva a grandes pérdidas económicas.
“Estamos hablando que hemos dejado de capturar cerca de 20 mil toneladas, si lo multiplicas el precio estamos hablando de mil 400 millones de pesos, para un sector que se reparte entre más 12 mil pescadores”, indicó.
Refirió que aunque para esta temporada 2020 se tenía previsto una meta de al menos 18 mil toneladas, dadas las circunstancias climatológicas y de salud, no se prevé que se alcancen, por lo que reiteró que cerrará mal.
“Estamos viendo un panorama muy difícil para el sector, esperemos que mejore pero no creemos que alcancemos al menos las 18 mil toneladas”, acotó.