ISIS RÁBAGO. MILENIO LAGUNA.
Óscar, que desde hace seis años se instala en Francisco Sarabia y Aldama en Lerdo dijo que este negocio es la única fuente de ingresos que tiene su familia.
LERDO, Durango. En la temporada alta de la cosecha de melones y sandías, los vendedores reflejan pérdidas debido a la contingencia sanitaria por el nuevo coronavirus SARS-CoV-2 que provoca la enfermedad covid-19.
Óscar Jesús Ramírez Martínez, originario de Lerdo, desde hace seis años se instala en la esquina de Francisco Sarabia y Aldama para ofrecer melones y sandías que compra en Matamoros, Viesca, Tlahualilo y otras ciudades.
Como a todos los sectores comerciales, la contingencia sanitaria también le ha afectado, primero porque no hay presencia de personas en el primer cuadro de la ciudad y ahora porque deberán moverse del tradicional lugar debido a las medidas restrictivas implementadas por el municipio.
Ramírez Martínez, dio a conocer que este negocio es la única fuente de ingresos que tiene su familia, situación por la cual no puede pensar en implementar la cuarentena.
Una camioneta llega de melones y sandías, en los días regulares las vende en dos días, mientras que ahora, recuperan la inversión hasta dentro de cuatro días.
La difícil situación económica que se vive actualmente, aunado a la escasez de empleo, les impide dejar de vender los melones y sandías, eso si, resaltó que con las medidas preventivas adecuadas para evitar la propagación del contagio covid-19.