MAURICIO FLORES. GENTE DETRÁS DEL DINERO. LA RAZÓN.
A pesar de los recortes presupuestales que enfrentó la Sader, los esfuerzos para lograr más con menos y la coordinación directa con los productores agrícolas, ganaderos y pesqueros, se obtuvieron soluciones tecnológicas que permiten alimentar a 120 millones de personas… lo cual sería bajo el modelo de “agroecología” que de manera radical pretende imponer el grupo político al que pertenece el titular de Semarnat, Víctor Manuel Toledo.
Sin embargo, todo indica que ese grupo ambientalista radical ganó la última partida (sobre la autorización o no a la importación de glifosato como herbicida) sobre Villalobos quien, se sabe, presentaría su renuncia en los próximos días.
Vaya, las acciones de Suárez Carrera han sido denunciadas por Bosco de la Vega, presidente del Consejo Nacional Agropecuario, como actos deliberados para desmantelar el sistema agroalimentario. Y desde el CCE, que encabeza Carlos Salazar, se considera que las posiciones de Suárez Carrera empatan plenamente con la cruzada del subsecretario de Salud, Hugo López-Gatell, contra los alimentos industrializados.
Pero retomar técnicas antiguas para una producción necesariamente masiva elevaría los costos a los consumidores y se perdería la soberanía alimentaria que México construyó en tres décadas. Veremos qué sucede.